Un divorcio "civilizado"
Un Tribunal de Ginebra le concedió a Rybolovlev la suma de 4.020.555.987,20 francos suizos, según Le Temps. Esta suma constituye un récord en la historia de los tribunales helvéticos, según el diario suizo.
Este multimillonario no sólo perdió gran parte de su fortuna sino también la tutela de su hija menor, Anna, de 13 años.
La pareja estaba en pleito desde el 2008. La señora Rybolovlev reclamaba varios miles de millones de dólares a su exmarido, cuya fortuna se calcula en 9 mil millones de dólares.
Desde que presentara su demanda de divorcio, Elena había sido seguida de modo casi permanente por detectives privados, según aseguró en enero en una rara entrevista concedida a la revista suiza Bilan. Según aseguraba, esperaba que su divorcio terminase "de modo civilizado".
Un mes después, fue detenida brevemente por la policía chipriota. En nombre de los fondos destinados a gestionar los fondos para las dos hijas de la pareja - Anna y Katia (25 años)-, un abogado chipiotra demandó a Elena acusándola de robar un anillo de diamantes.
Fue liberada sin ningún cargo contra ella y aseguró que el diamante era un regalo de su marido.
Esta historia de amor duró 23 años. La pareja se conoció mientras estudiaba en la facultad de medicina de Perm, en los Urales, en tiempos de la URSS. Se casaron en 1987 en Chipre. En plena campaña contra los oligarcas, en 1995 se instalaron en Ginebra.
Dmitri pasó 11 meses en prisión al año siguiente, acusado de haber ordenado la muerte de un industrial. Fue exonerado por falta de pruebas.
¿De dónde salió su fortuna?
Rybolovlev hizo fortuna al vender Uralkali, uno de los mayores fabricantes de potasio del mundo. En diciembre de 2011 adquirió el club de fútbol de Mónaco. Actualmente vive en el Principado.
El millonario ha sido protagonista de grandes adquisiciones de suelo: ha comprado la isla griega de Skorpios, propiedad de la familia Onassis, la villa de Miami de Donald Trump y la del actor Will Smith en Hawaii, así como un inmueble en Saint-Tropez.
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